[align=center]Revista Materiales Peligrosos[/align]
[align=right]Edición Nº 2 - 2 de Diciembre de 2007[/align]
[align=center]Emergencias con Cloro, ¿Estamos Preparados?
Primera Parte - Generalidades[/align]
Uno de los productos que más es utilizado en la actualidad es el cloro. Ya sea como parte componente o ingrediente de elementos de limpieza, como blanqueador de la celulosa o de telas, o como materia prima en la fabricación de múltiples elementos de uso cotidiano (PVC, plásticos en general), este elemento es utilizado por muchas industrias. Anualmente se producen más de 40 millones de toneladas, y sólo en los EE.UU se producen más de 12 millones de toneladas por año.
Sin embargo, el cloro tiene otro uso común en todas las ciudades, al ser el elemento requerido para la potabilización del agua. Elimina las bacterias dañinas del agua para beber, y del agua de las piscinas.
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Ante esto, bien cabe preguntarse si como bomberos estamos en condiciones de responder en caso de producirse una emergencia de este tipo, más aún considerando que somos –dentro de ciertos parámetros bien discutibles– los más preparados para este tipo de eventos.
Es por eso que en esta edición de la Revista de Materiales Peligrosos tocamos un tema de gran importancia, con algunos puntos a tener en consideración por aquellos que responden a emergencias con cloro, ya sea en la primera respuesta o en el control mismo de la emergencia. Debido a lo extenso y apasionante del tema, en esta oportunidad tocaremos aspectos básicos, y para próximas ediciones dejaremos aspectos más técnicos, propios de la respuesta a emergencias.
Cloro – Propiedades
El Cloro es un gas que en estado puro y en condiciones normales es de color amarillo-verdoso, con olor picante sofocante, fácil de detectar a través del olfato a concentraciones de 0.2 a 0.4 ppm; es un olor parecido al que podemos encontrar en el blanqueador, el hipoclorito de sodio usado en los hogares (y que en forma errónea denominamos como “cloro”). Es una sustancia tóxica por inhalación. No es explosivo ni inflamable, pero es capaz de sostener cualquier combustión. Reacciona con hidrocarburos, alcoholes, acetileno, hidrógeno y amoníaco, entre otros. Reacciona con el agua para formar ácido hidroclórico y ácido hipocloroso. Oxida el acero a 250º C.
A presión atmosférica hierve a aproximadamente -34º C y se congela a aproximadamente -101º C, por lo que en condiciones normales el cloro lo encontraremos en estado gaseoso. Debido a que es más pesado que el aire (gravedad específica= 2.485, con el aire), al liberarse tiende a ocupar las zonas más bajas. En estado líquido es más pesado que el agua (gravedad específica= 1.467). Es muy poco soluble en agua, sólo 6.93 libras por cada 100 galones (16º C, 1 atm).
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Es una sustancia tóxica (riesgo primario) y corrosiva (riesgo secundario). A su vez es un fuerte oxidante, propiedad que le permite sostener prácticamente cualquier combustión, como detallábamos anteriormente. Como efectos adversos a la salud, el cloro es principalmente irritante. En concentraciones suficientes irrita las membranas mucosas, el tracto respiratorio y los ojos. El contacto con cloro líquido puede causar quemaduras por congelamiento.
Durante o inmediatamente después de la exposición a concentraciones peligrosas de cloro, pueden presentarse los siguientes signos y síntomas:
Hasta el momento no existen antecedentes de efectos crónicos del cloro en el organismo, ni existen antecedentes que sea un elemento carcinogénico.
Usos del Cloro
El cloro se usa principalmente en la elaboración de plásticos, y de otros productos de consumo masivo. Se estima que en EE.UU el 40% de las industrias lo utilizan en su producción, y prácticamente la totalidad de las industrias lo utilizan de manera indirecta.
En el ámbito de la salud, aparte de su uso para la potabilización del agua y como agente desinfectante, es utilizado como materia prima en el 85% de los medicamentos. De hecho, el cloro es considerado uno de los avances más significativos en lo que respecta a la salud pública.
Transporte de Cloro
En nuestro país, el cloro es almacenado y transportado de cuatro maneras: en cilindros, en contenedores, camiones cisterna y en isotanques. Debido a sus propiedades es posible licuarlo bajo presión, por lo que en todos estos envases lo podemos encontrar en equilibrio en fase gas-líquido.
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Todos los envases son de acero, y deben ser inspeccionados y testeados, regularmente. Deben llevar las marcas de las pruebas a que han sido sometidos, de acuerdo a las especificaciones con que han sido construidos.
Próxima Edición: Segunda parte - Tipos de envases, Características.
Preparado por Segundino de Corazón.
Bibliografía:
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[align=right]Edición Nº 2 - 2 de Diciembre de 2007[/align]
[align=center]Emergencias con Cloro, ¿Estamos Preparados?
Primera Parte - Generalidades[/align]
Uno de los productos que más es utilizado en la actualidad es el cloro. Ya sea como parte componente o ingrediente de elementos de limpieza, como blanqueador de la celulosa o de telas, o como materia prima en la fabricación de múltiples elementos de uso cotidiano (PVC, plásticos en general), este elemento es utilizado por muchas industrias. Anualmente se producen más de 40 millones de toneladas, y sólo en los EE.UU se producen más de 12 millones de toneladas por año.
Sin embargo, el cloro tiene otro uso común en todas las ciudades, al ser el elemento requerido para la potabilización del agua. Elimina las bacterias dañinas del agua para beber, y del agua de las piscinas.
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Ante esto, bien cabe preguntarse si como bomberos estamos en condiciones de responder en caso de producirse una emergencia de este tipo, más aún considerando que somos –dentro de ciertos parámetros bien discutibles– los más preparados para este tipo de eventos.
Es por eso que en esta edición de la Revista de Materiales Peligrosos tocamos un tema de gran importancia, con algunos puntos a tener en consideración por aquellos que responden a emergencias con cloro, ya sea en la primera respuesta o en el control mismo de la emergencia. Debido a lo extenso y apasionante del tema, en esta oportunidad tocaremos aspectos básicos, y para próximas ediciones dejaremos aspectos más técnicos, propios de la respuesta a emergencias.
Cloro – Propiedades
El Cloro es un gas que en estado puro y en condiciones normales es de color amarillo-verdoso, con olor picante sofocante, fácil de detectar a través del olfato a concentraciones de 0.2 a 0.4 ppm; es un olor parecido al que podemos encontrar en el blanqueador, el hipoclorito de sodio usado en los hogares (y que en forma errónea denominamos como “cloro”). Es una sustancia tóxica por inhalación. No es explosivo ni inflamable, pero es capaz de sostener cualquier combustión. Reacciona con hidrocarburos, alcoholes, acetileno, hidrógeno y amoníaco, entre otros. Reacciona con el agua para formar ácido hidroclórico y ácido hipocloroso. Oxida el acero a 250º C.
A presión atmosférica hierve a aproximadamente -34º C y se congela a aproximadamente -101º C, por lo que en condiciones normales el cloro lo encontraremos en estado gaseoso. Debido a que es más pesado que el aire (gravedad específica= 2.485, con el aire), al liberarse tiende a ocupar las zonas más bajas. En estado líquido es más pesado que el agua (gravedad específica= 1.467). Es muy poco soluble en agua, sólo 6.93 libras por cada 100 galones (16º C, 1 atm).
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Es una sustancia tóxica (riesgo primario) y corrosiva (riesgo secundario). A su vez es un fuerte oxidante, propiedad que le permite sostener prácticamente cualquier combustión, como detallábamos anteriormente. Como efectos adversos a la salud, el cloro es principalmente irritante. En concentraciones suficientes irrita las membranas mucosas, el tracto respiratorio y los ojos. El contacto con cloro líquido puede causar quemaduras por congelamiento.
Durante o inmediatamente después de la exposición a concentraciones peligrosas de cloro, pueden presentarse los siguientes signos y síntomas:
- • Tos.
• Presión en el pecho.
• Sensación de ardor (quemazón) en la nariz, la garganta y los ojos.
• Lagrimeo.
• Visión borrosa.
• Náusea y vómito.
• Dolor por ardor (o quemazón), enrojecimiento y ampollas en la piel si se presentó la exposición al gas. Lesiones en la piel, parecidas a las del congelamiento por el frío, si se presentó exposición al cloro líquido.
• Dificultad para respirar o falta de aliento (puede presentarse inmediatamente si se inhalaron altas concentraciones de cloro gaseoso o puede demorarse en aparecer si se inhalaron bajas concentraciones de cloro gaseoso).
• Líquido en los pulmones (edema pulmonar) entre 2 a 4 horas después de la exposición.
Hasta el momento no existen antecedentes de efectos crónicos del cloro en el organismo, ni existen antecedentes que sea un elemento carcinogénico.
Usos del Cloro
El cloro se usa principalmente en la elaboración de plásticos, y de otros productos de consumo masivo. Se estima que en EE.UU el 40% de las industrias lo utilizan en su producción, y prácticamente la totalidad de las industrias lo utilizan de manera indirecta.
En el ámbito de la salud, aparte de su uso para la potabilización del agua y como agente desinfectante, es utilizado como materia prima en el 85% de los medicamentos. De hecho, el cloro es considerado uno de los avances más significativos en lo que respecta a la salud pública.
Transporte de Cloro
En nuestro país, el cloro es almacenado y transportado de cuatro maneras: en cilindros, en contenedores, camiones cisterna y en isotanques. Debido a sus propiedades es posible licuarlo bajo presión, por lo que en todos estos envases lo podemos encontrar en equilibrio en fase gas-líquido.
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Todos los envases son de acero, y deben ser inspeccionados y testeados, regularmente. Deben llevar las marcas de las pruebas a que han sido sometidos, de acuerdo a las especificaciones con que han sido construidos.
Próxima Edición: Segunda parte - Tipos de envases, Características.
Preparado por Segundino de Corazón.
Bibliografía:
- - Center for Disease Control and Prevention. US Department of Health and Human Services
- The Chlorine Institute
- US Environmental Protection Agency
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