El matrimonio, conformado por Paola Mancilla Uribe, de 27 años, y su esposo Héctor Oyarzo Navarro, 48 años, fue encontrado ayer sin signos vitales en el segundo piso de su casa habitación, de calle Raquel Vidal Nº0140, en la población Octavio Castro.
El sábado había sido un día especial, de mucha alegría, al celebrarse el cumpleaños de Paola. Junto a su esposo y amistades festejaron el acontecimiento en la sede vecinal del sector poblacional y posteriormente salieron a compartir con sus amigos.
A raíz de lo anterior dejaron a sus tres hijos, Pedro de 10 años, Nicolás de 5 años y Montserrat de un año, al cuidado de su abuela materna.
Ayer, en la mañana, sus familiares llamaron por teléfono insistentemente a la casa del matrimonio. Al no tener respuesta, el mayor de sus hijos, fue corriendo hasta su hogar, abriendo la puerta con la llave que portaba. Allí encontró a sus padres fallecidos en el segundo piso del inmueble: Héctor Oyarzo se encontrada acostado en la cama matrimonial, y su esposa, presumiblemente intentando buscar ayuda, estaba en el suelo, en posición decúbito dorsal lateral.
A las 14,45 horas se solicitó la presencia del Samu. El personal realizó las respectivas maniobras de reanimación, sin resultados positivos. También llegó Carabineros, voluntarios de la Unidad de Rescate del Cuerpo de Bomberos y personal de Gasco, que procedió a cortar el suministro de gas natural.
En las inmediaciones se reunió un gran número de personas, debido a que se trata de una querida familia natalina. Paola Mancilla era secretaria de la junta de vecinos de la población Octavio Castro.
El ayudante del fiscal Daniel Soto, solicitó la concurrencia del Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar) de Punta Arenas, que llegó al lugar a las 20,20 horas. Antes que ingresaran al inmueble, los voluntarios del Cuerpo de Bomberos realizaron una inspección, para prestar el servicio de seguridad, porque se presumía que había presencia de gas natural al interior de la vivienda.
Tras un trabajo que se extendió hasta las 22,40 horas anoche, fueron retirados los restos de la infortunada pareja por el Servicio Médico Legal, en cuyas instalaciones anoche se realizaba la autopsia de rigor.
Monóxido de carbono
El capitán de Carabineros, Rodrigo Fuentes, de Labocar de Punta Arenas, informó que los cuerpos no presentaban lesiones atribuibles a terceras personas. Los restos tenían una data de muerte entre 12 a 14 horas.
Tras el retiro de los cadáveres, nuevamente los voluntarios del Cuerpo de Bomberos ingresaron a la casa habitación, donde procedieron a efectuar mediciones sobre la presencia de gas.
El comandante del Cuerpo de Bomberos, Sergio Ramírez, informó que "al ingresar pudimos constatar que las instalaciones del calefon, que se encontraba al interior de la cocina, y un calentador, presentaban evidentes fallas de instalación, fuera de norma en lo que es seguridad".
Sobre todo el calefón, no contaba con ducto de evacuación de gases hacia el exterior.
Al hacer las mediciones sobre la presencia de gas, al cabo de media hora de trabajo, se constató niveles de monóxido de carbono.
Las muestras arrojaron una altísima concentración del letal gas que llegó a niveles de 99,9% de partículas por millón (sobre un 60% es mortal).
En el lugar se produjeron conmovedoras muestras de dolor por parte de familiares y amigos. Entre ellos se encontraba el abuelo de la infortunada mujer, el querido diácono de la iglesia Católica, Pedro Mancilla.
La noticia del fallecimiento fue conocido por los fieles durante la procesión a Jesús Nazareno. Por lo anterior el párroco, Jorge López, realizó una oración por su descanso eterno, antes de ingresar con la imagen al templo parroquial.
Ayer se había levantado una capilla ardiente en la sede vecinal, donde serán velados sus restos.
fuente: laprensaaustral.cl
