A la una de la madrugada comenzó a arder uno de los símbolos de la jet set parisina: el Hotel Lambert, un palacio situado en la Isla de Sain Louis, al borde del Sena. Más de cien de bomberos trataron de controlar el incendio que en este palacio del siglo XVII que actualmente estaba en obras después de ser adquirido en 2007 por 60 millones de euros por la familia del emir de Catar. Los bomberos trataron de controlar las llamas que, según un responsable, comenzaron en el tejado, con riesgos de propagación a edificios próximos a causa de la presencia de bombonas de gas con motivo de las obras de reforma que se estaban llevando a cabo en su interior. El fuego ha durado hasta las siete de esta mañana.
El Hotel Lambert, es obra del mismo arquitecto de Versalles, Luis Le Vau. Fue habitado en los años de posguerra por el millonario chileno Arturo López-Willshaw y su amigo íntimo el barón Alexis de Redé, que vendió el palacio en 1975 a Guy y Marie-Hélène de Rotschild. Este palacio fue escenario de fiestas míticas de la alta sociedad internacional, como el «Baile oriental» organizado por el barón de Redé o numerosas fiestas organizadas por la considerada reina de la sociedad de París, la baronesa Marie-Hélène de Rotschild.
El palacio, catalogado como edificio histórico, está sumido de lleno en una obra para modificar diversos elementos arquitectónicos que suscitaron una importante polémica en París, lo que llevó a la Administración francesa a prohibir algunos de los proyectos iniciales de los actuales propietarios, como un ascensor para coches, e incluso suscitó una plataforma de recogida de firmas entre quienes conocieron el Hôtel Lambert en sus tiempos de oro para evitar su modificación y desaparición
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