Eran pasadas las 1.30 horas de la madrugada de ayer cuando ingresaron varios llamados a la Central de Alarmas del Cuerpo de Bomberos de Punta Arenas, donde solicitaban la presencia de unidades en calle Prat casi esquina con Juan Enrique Rosales.
De inmediato se despacharon tres unidades, pertenecientes a la Primera, Cuarta y Octava compañías, las que en el trayecto se informaron que existía un siniestro de gran magnitud, debido a que desde el lugar emanaba una gran columna de humo.
A la llegada verificaron que se trataba de un taller, el cual estaba ardiendo por todos sus frentes, con llamas amenazaban con propagarse a las viviendas contiguas, debiendo desplegar los esfuerzos necesarios para evitar esto y logrando la contención de la emergencia.
Durante media hora los voluntarios trabajaron para poder dar por controlada la emergencia que, en definitiva, consumió en su totalidad un taller de carpintería y un taller de electromecánica.
De igual forma, la propiedad principal del sitio, donde además se ubica un almacén, sufrió daños menores producto de la radiación de calor que existía en el lugar de la emergencia. Una vez sofocado el fuego se dio inicio a los peritajes, pese a que no existen seguros comprometidos por parte de los ocupantes de la estructura que se encontraba subdivida.
Uno de los perjudicados es el mecánico José Alvarado, quien hace diez años se encontraba trabajando en dicho lugar, el cual arrendaba a tan sólo pocos metros de su casa.
“Yo estaba durmiendo, mi mujer igual y ella se levantó al baño cuando vio que salía humo de acá y llamamos a Bomberos, pero se estaba quemando todo. Yo vivo acá, a pocos metros, arriendo una casa a la misma señora que le arrendaba el taller, así que vine de inmediato, pero no había nada que hacer. Menos mal que no acostumbro a dejar autos guardados, sino que los trabajo y los entregaba el mismo día, pero igual son pérdidas millonarias, yo creo que hasta cerca de los 15 millones de pesos”.
“Ahora qué se le va a hacer, nadie quiere quemar las cosas, pero bueno, ya está, habrá que trabajar para salir adelante. Perdí todo, mis herramientas, unos repuestos de auto que me habían llegado de autos modernos. Así que ahora a seguir trabajando para poder seguir viviendo”, señaló el afectado, quien mostraba resignación pese a todo lo que le tocó vivir durante las últimas horas.
Por el momento no mantiene ninguna herramienta de trabajo, y pese a que prefiere esperar, las personas que deseen ayudar pueden hacer llegar su aporte en herramientas al domicilio de calle Prat 1998, en el Barrio 18 de Septiembre.
Las labores de limpieza de lo siniestrado se realizaron ayer de manera inmediata, sacando parte de los repuestos y herramientas quemadas en una batea, para que sean dejados en el vertedero.
El informe con respecto a las cusas será elaborados por peritos del Cuerpo de Bomberos de Punta Arenas, que entregarán los antecedentes a la Fiscalía.
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