El helicóptero, un Eurocopter 225, cayó cerca de la pequeña isla de Turoey, justo al oeste de la localidad de Solsvik.
Según han declarado los equipos de rescate, a su llegada al lugar del siniestro, 11 personas ya se encontraban fallecidas y otras 2 más se encuentran aún desaparecidas, después de que un helicóptero se estrellase al oeste de la ciudad noruega de Bergen. A bordo del helicóptero viajaban 13 personas en las que se incluyen los dos pilotos. Se sabe que 11 de ellos eran de Noruega, 1 era británico y el otro italiano.
El helicóptero fue "totalmente destruido". Según han informado, volaba desde el yacimiento de petróleo Gullfaks a Bergen, un centro para la industria del petróleo y gas del Mar del Norte. Los informes indican que todos los pasajeros del helicóptero eran empleados de Statoil. La petrolera ha dejado en tierra temporalmente todos los helicópteros del mismo tipo.
Morten Kronen, portavoz de la policía, explicó que se ha puesto en marcha una operación importante. Un trabajo conjunto entre los bomberos, los buzos y los asistentes médicos, para rescatar a las 2 personas desaparecidas lo antes posible.
Los testigos dicen haber visto como la pala del rotor del helicóptero se soltaba y salía despedida. Un residente de la localidad explicó al periódico local Bergensavisen que "hubo una gran explosión y un fuerte sonido muy peculiar, y miré desde mi ventana. Vi el helicóptero cayendo precipitadamente en el mar. Y vi una gran explosión".
Fotos de la escena muestran un denso humo procedente de un área de islotes rocosos. Según los medios de comunicación locales, a causa de la explosión, algunos restos se encontraron en la isla y partes del casco están todavía dentro del mar.
Por su parte, la empresa de servicios de CHC Helicopter, a la que pertenecían los 2 pilotos, ha confirmado que hubo un incidente con uno de sus aviones en el sector noruego.
Por el momento, no se han hecho públicos los nombres, el sexo, ni la edad de los desaparecidos, tampoco de los fallecidos.
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