El líder de Podemos, Pablo Iglesias, se une a la manifestación criticando la «precarización» del Cuerpo
Al grito de «el pueblo entero está con los bomberos», unas cuatro mil personas se han echado este domingo a la calle para apoyar a los bomberos de Málaga capital, que se han manifestado por segunda vez desde que a finales de 2016 estalló el conflicto laboral que mantienen con el Ayuntamiento para exigir más recursos que redunden en la calidad del servicio y también mejores condiciones socioeconómicas. Familiares, amigos, malagueños sin ningún tipo de vínculo con el Cuerpo y efectivos de otras provincias se han unido a esta marcha en la que en el plano político ha destacado la presencia del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias.
Antes de iniciar la marcha desde el parque central de Martiricos hasta la plaza de la Constitución, el líder de Podemos ha criticado la «precarización» de los bomberos, a los que ha puesto como «ejemplo de profesionalidad y de lucha». «No hay dinero pero el Ayuntamiento se gastó casi 30 millones en un museo de piedras preciosas que quedó en nada. El dinero de los bomberos es el dinero de la seguridad de los malagueños», ha reprochado Iglesias, que ha estado acompañado por otros diputados como Alberto Rodríguez y el malagueño Alberto Montero. En la marcha también han participado concejales de toda la oposición en el Ayuntamiento de Málaga (PSOE, Ciudadanos, Málaga Ahora e IU-Málaga para la Gente).
Resumidas en las tres ‘R’, lo que piden los bomberos en materia laboral es un nuevo reglamento que actualice el vigente desde 1959, la regularización de la jornada laboral (es de 1.822 horas, de las más alta del país) y la reclasificación profesional del grupo C2 al C1 para tener la categoría de bomberos especialistas como establece la Ley de Emergencia de Andalucía y así equipararse, también económicamente, al resto de profesionales de la región. Aunque el nuevo convenio colectivo de la capital les ha rebajado una guardia de 24 horas, la plantilla trabaja 1.822 horas anuales; que equivalen a 76 guardias durante 11 meses, excluyendo el periodo vacacional. Una cifra muy superior al de la mayoría de grandes ciudades del país, donde están en torno a las 1.600 horas. Entre las principales capitales, los bomberos de Madrid y Sevilla son los que presentan un menor cómputo anual (1.520 horas repartidas en 64 guardias), mientras que Valencia está en 1.560 (65 guardias). Las ciudades que más se le acercan, aunque siguen a una gran distancia, son Barcelona y Zaragoza, con 1.680 (70 guardias).
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